Inicio >> actualidad

Los nueve escenarios en los que se moverán los expatriados

E & E

enviar a un amigo

 


Están muy preparados, poseen experiencia en el extranjero y acuden fuera de su país de origen en busca de desarrollo profesional. El perfil del expatriado está cambiando: Los atractivos paquetes económicos están en desuso, crecen las asignaciones a corto plazo y se reducen los beneficios. Asia es ahora el destino estrella.

Trabajar en el extranjero es una de las opciones más apetecibles para muchos ejecutivos que no encuentran trabajo en casa. Según una encuesta que realizó Hays entre 5.000 profesionales, un 78,5% de los mismos aceptaría un puesto internacional, al igual que muchos de los jóvenes: un informe de PwC confirma que el número de junior dispuestos a trabajar fuera se incrementará en un 50% hasta 2020.

Esta realidad dista de las tendencias de futuro. Economist Intelligence Unit ha publicado un informe recientemente que aventura una serie de novedades que darán una vuelta de tuerca a la expatriación. Algo que, por otra parte, ya es una realidad: los periodos de expatriación se reducen y surge la figura del commuter, es decir, un ejecutivo que viaja durante un tiempo no superior a cuatros meses al país de destino y desarrolla al personal local para que pueda operar con autonomía bajo las directrices de la central.

Otro factor que también determinará un cambio es que la recesión económica ha obligado a las empresas a apretarse el cinturón: cada expatriación se mira con lupa, lo que prima es la consecución de ingresos de una manera inmediata. Según el último estudio de Mercer, el número de expatriados ha aumentado un 4% desde 2008, pero la crisis ralentiza este incremento. Crecen las asignaciones a corto plazo –el 50% de las compañías ha aumentado este tipo de asignaciones-, las contrataciones locales –el 50% de las empresas amplia o prevé ampliar el número de contrataciones locales– y se eliminan o reducen algunos beneficios.

Según el informe de Economist –realizado a partir de las opiniones de 418 ejecutivos procedentes de 77 países-, la globalización exige una fuerza laboral móvil mundial capaz de administrar las operaciones en remoto. Es una evidencia que el estancamiento de la demanda en los mercados occidentales anima a las empresas a buscar sus ingresos fuera, sobre todo en los países emergentes, en los que el sistema operativo puede ser complicado.

Conseguir las personas adecuadas que lleven a cabo una estrategia internacional cada vez es más sencillo por el tipo de misiones, la remuneración, las inversiones en dotación de personal y lugares de trabajo y, sobre todo, las presiones profesionales, culturales y familiares que pueden abrumar a los ejecutivos más resistentes. Este estudio recoge nueve tendencias clave:

1)La recesión frena las asignaciones internacionales Aunque los mercados emergentes se consideran el motor para el crecimiento empresarial, los imperativos financieros a corto plazo han aplazado la transferencia de conocimientos a estas regiones. Aunque el 39% de las empresas planea aumentar su personal extranjero en los próximos cinco años, sólo el 13% lo ha hecho en los dos últimos.

2)Asia, destino estrella ... continua >>

 


 
enviar a un amigo