La CEOE pide retrasar al 2009 el incremento del salario mínimo
Las antiguas recetas continúan plenamente vigentes para los empresarios aunque sea para afrontar crisis nuevas. El presidente de la patronal CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, propuso ayer que el Gobierno flexibilice el despido de los trabajadores para que las empresas puedan reducir costes. Además pidió una moratoria hasta pasado el 2009 para comenzar a negociar la subida del salario mínimo interprofesional hasta 800 euros.
La patronal ha llevado su reivindicación de abaratar o facilitar la extinción de los contratos a prácticamente todas las etapas del diálogo social. El expresidente de la CEOE, José María Cuevas, no logró más que algunas rebajas en el coste de la indemnización por despido.
Su sucesor, Díaz Ferrán, ha cogido el testigo y ayer, en un almuerzo organizado por el diario ABC, volvió a insistir en que "se deberían dar facilidades al empresario para que, si tiene que estrechar plantillas, pueda hacerlo". La legislación española y europea sobre el despido es claramente garantista para el trabajador. El líder de la CEOE sugirió que España "analice" el sistema de EEUU, mucho más liberal, que ha dado como resultado un nivel de paro que es "la mitad que el de Europa".
La CEOE quiere discutir en la mesa de negociación con los sindicatos fórmulas contractuales más flexibles y más seguras aunque, en el actual contexto de crisis, Díaz Ferrán quitó importancia al nombre que se le dé al contrato. "Todos son temporales o fijos, depende de cómo le vaya a la empresa", argumentó.
Promesa electoral
El máximo dirigente de la patronal también pedirá al Gobierno y a los sindicatos aplazar la discusión sobre el SMI hasta que haya pasado la actual desaceleración económica. Díaz Ferrán se mostró convencido de que, al ser una promesa electoral del PSOE, la subida del SMI se va a realizar pero quiere que se ponga en marcha de manera gradual a partir del 2009 ya que, "cuando una subida está fuera de los convenios, se traslada a los salarios de todas las categorías profesionales y es un desastre".
Para la CEOE, la crisis provocará 500.000 parados y la deberán afrontar todas las instituciones. Su presidente considera que las medidas adoptadas por el Gobierno son insuficientes y apuesta por suprimir impuestos como el de sucesiones, donaciones y patrimonio; externalizar servicios públicos; liberalizar sectores; abordar un plan de infraestructuras que permita la entrada de capital privado y pedir al Banco Central Europeo que baje los tipos de interés para reactivar el consumo.
Además, Díaz Ferrán quiere debatir sobre energía nuclear y, de entrada, alargar la vida de las actuales centrales, porque ve poco "pragmático" comprar la electricidad francesa que se genera con nucleares.
